Es el hábito de la
comunicación efectiva. Su implementación puede ser de forma inmediata.
El proceso de la
comunicación incluye: la comunicación oral y escrita. El mensaje enviado por el
emisor y el receptor, como se observa en la siguiente imagen:
El problema del proceso
de comunicación se da en el receptor, por la falta de entrenamiento para
escuchar. No entiende a la otra persona desde su propio marco de referencia. Es
poco común la persona que escucha con la intención de entender. Generalmente se
escucha con la intención de contestar.
Es necesario escuchar
con empatía, esta se convierte en una herramienta muy poderosa y proporciona
información precisa.
Cuando una persona
tiene satisfecha sus necesidades de afecto y psicológicas, se encuentra abierta
a nuevas propuestas y será más susceptible de aceptar nuevas ideas para
trabajar. En ese momento se puede influir y trabajar en una solución
“ganar/ganar”.
Después de comprender
sigue saber ser comprendido, esta es la otra mitad del quinto hábito,
igualmente esencial para alcanzar soluciones ganar/ganar. En situaciones
interdependientes es importante ser comprendidos. Dejarse influir es la clave
para influir en los otros.
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